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miércoles, 9 de octubre de 2013

Samhain - Noche de las Brujas

Samhain (Última Cosecha) 31 de octubre en el Hemisferio Norte / 1 de mayo: Hemisferio Samhain (se pronuncia sou-in) y significa "fin del verano".



 Es un festival de origen celta y es la fiesta más popular entre los wiccanos o al menos es la que más prefieren algunos. El ritual que se celebra tiene como nombre "Noche de los Antepasados o Banquete de los muertos". Es la celebración que conmemora la muerte del dios y su viaje al otro mundo, mientras la diosa llora su muerte, también es conocida como la noche más mágica de todo el año donde el velo de los dos mundos desaparece.

 En este Sabbat se recuerdan y se rinde tributo a nuestros antepasados ya que es muy fácil contactar con ellos en dicha noche, también es una excelente noche para la adivinación. Se abre la puerta que nos separa del mundo de los muertos para que estos puedan visitar a sus familiares. Rituales en honor a nuestros difuntos y antepasados, se les honra y ofrece regalos. Se deja comida y dulces en las puertas de las casas o en los altares. En las ventanas se colocan velas con cintas negras atadas a ellas para protegerse de los malos espíritus y para atraer a los espíritus de nuestros difuntos a casa. Con este Sabbat inicia un tiempo "oscuro" no es recomendable practicar cierto tipo de magia y es mejor guardar reposo y energía ya que representa un tiempo transitorio, el final del año y el comienzo del nuevo año wiccano.

 El dios ha muerto pero no es definitivo, es el fin de un ciclo y el inicio del otro donde la promesa de una nueva vida se cumplirá en el nacimiento del dios en el sabbat de Yule. Noche propicia para augurios y adivinación. Época para deshacernos de las debilidades y para meditar y reafirmar la creencia de que la muerte física no es el final ni nada aterrador, sino algo natural y necesario para poder renacer. Reflexionamos sobre lo acontecido en el año, reconocemos errores cometidos y tratamos de corregirlos. Tiempo de arrepentimiento y purificación del alma. En Samhain podemos venerar a la diosa en su aspecto de anciana y pedirle sabiduría para dejar todas las cosas inservibles de nuestra vida atrás y empezar de nuevo.

 Diosas: todas las Diosas Brujas y las Diosas del Inframundo: Hécate (griega), Carlin (escocesa), Edda (escandinava), Pamona (romana), Crobh Dearg (irlandesa), Lilith (Sumeria) Psique (griega), Morrigu/Morrigan (escocesa).
 Dioses: todos los Dioses de la Muerte, Todos los Dioses Viejos, Todos los Dioses del Inframundo: Arawn (galés), Dis (romano), Kronos/Cronos (Fenicio-Griego), Michtantecuhtli (azteca), Woden (Anglo Saxon), Plutón (Roma), Hades (griego), Osiris(egipcio) 

Hechizos: Protección, purificación. Actividades: Adivinación, contactar con los antepasados, vidas pasadas. Hierbas: Artemisia, Salvia, manzanos, planta de calabaza. Gemas: Ónix, obsidiana, Cornalina. Flores: flores otoñales, lirios, azahar, etc. Comida: calabaza, manzana, maíz, pan de jengibre, vino suave o jugos naturales, nabos, granadas. Colores: naranja, negro, marrón, rojo oscuro.



fuentes: The Scarlet Witch

martes, 1 de octubre de 2013

El Aura

En términos básicos, el aura es una energía luminosa o campo electromagnético que rodea en forma de óvalo a todos los seres vivos y que es imperceptible a plena vista. Es la combinación del cuerpo etéreo, emocional y físico, al igual que de la información de nuestras almas. El aura está ligada a los chakras.

Todos nuestros pensamientos, sentimientos, y experiencias están reflejadas en el aura, al igual que energía que atraemos de nuestro entorno. En este sentido, el alma refleja nuestra energía y atrae energía de otros cuerpos y ambientes.

Al igual que todo lo demás en el universo, el aura es vibración y como tal, responde a otras vibraciones. De esta manera, vibraciones en forma de pensamiento, sentimiento o interacción con otras energías (en el espacio o de otras personas), afectan y moldean la vibración del aura.

Los objetos inanimados tienen también una energía que las rodea. Típicamente, estas auras son la combinación del entorno y de las energías de las personas que han estado en contacto con dicho objeto.

El aura no es estático. Cambia con el tiempo, con nuestra evolución personal y espiritual, y con el entorno. También podemos cambiarle con nuestra intención y con ejercicios de visualización y rituales de purificación.

Parte de lo que refleja nuestra aura es el reflejo de nuestro cuerpo físico que emite energía también. Por eso, algunos expertos en auras dicen que pueden decir si la persona sufre de alguna dolencia física al ver su aura.

Se dice que el aura consiste en 7 capas o cuerpos sutiles (algunos dicen que son 12 o muchos más) que se interconectan y afectan mutualmente constantemente.

El cuerpo etéreo es el más cercano al cuerpo físico y usualmente refleja nuestra salud física y nuestros instintos más básicos. Se manifiesta usualmente con un color azul o plateado suave pero si existe una enfermedad, se torna en colores oscuros, sobre todo alrededor del área afectada.

El cuerpo emocional, como su nombre lo indica, refleja el estado anímico de la persona, al igual que las reacciones emocionales frente a otros individuos y a situaciones. Por esta razón, es la capa del aura más instable, y cambia continuamente de acuerdo con el estado de ánimo de la persona. Sin embargo, los residuos de las emociones más fuertes como la rabia y miedo, permanecen almacenados en esta capa por algún tiempo y pueden con el tiempo afectar la salud emocional y física de la persona. Cada emoción genera colores diferentes en la capa emocional del aura y por lo tanto ésta puede manifestarse en cualquier tono o combinación de colores. Los colores más brillantes y puros usualmente indican emociones elevadas y paz. Los colores turbios son más característicos de emociones violentas o instintos bajos.

La capa o cuerpo mental se relaciona con lo que llamamos consciencia. Los pensamientos e intenciones conscientes del individuo se reflejan en esta capa. El amarillo y naranja son los tonos característicos del cuerpo mental. Se dice que las personas altamente intelectuales tienen un cuerpo mental de color amarillo brillante.

El cuerpo astral está atado al cuerpo físico por un cordón plateado, y refleja nuestros deseos superiores y nuestro avance espiritual en términos de amor incondicional. Es de alguna manera un portal con otras dimensiones, y se dice que puede desprenderse del cuerpo físico y transportarse libremente en las llamadas proyecciones astrales. También está ligado en parte a nuestra fuerza de voluntad. Puede manifestarse en varios colores que van desde el rosado puro hasta una mezcla de todos los colores del arco iris.

El cuerpo espiritual tiene que ver realmente con conexión y comunicación – con otros, con nosotros mismos y con nuestro propósito superior.

El cuerpo mayor o celestial es la conexión entre nuestra consciencia humana y el plano espiritual en donde frecuentemente se encuentran sueños y memorias de otras vidas o de experiencias extracorporales.

El cuerpo divino o espiritual es la conexión con el plano superior y la sabiduría divina, y se puede manifestar en un rayo y luz dorada brillante. Entre más separado esté el individuo de su propósito supremo y su camino espiritual, más oscura o bloqueada estará esta capa del aura.

Fuente:

http://nuevaera.about.com/od/Creencias/a/Qu-E-Es-El-Aura.htm